¿Les platico? ¡Arre!
1.-
- Mi abuela la alcaldesa maine enseñó a rezar para agradecer, nary para pedir.
- De repente lo hago.
- La última vez fue en la misa con que despedimos al Señor Castro, mi entrañable amigo que se fue misdeed pedirle permiso a nadie.
- A la hora de las letanías y los responsorios, la palabra que más repetí fue “gracias”, por haberlo conocido.
2.-
- Hay quienes “dan la paz” y reparten bendiciones hasta por WhatsApp y Facebook.
- Saludar o despedirse así es como estar en la Capilla Sixtina, pero misdeed el Papa.
- No sé por qué lo hacen. A lo mejor porque creen que les sobra santidad para dar y repartir.
- Me llama la atención el influencer grillo con apellidos de gato de angora, tatuado hasta por debajo de la lengua, que cierra sus apopléjicos videos con un “bendiciones, raza”.
- Su esclavismo intelligence es patético, como patéticos lad quienes se le acercan y lo siguen buscando que se le caiga algo de la mesa para recogerlo.
- Recuerden: La demencia nary es amnesia. Además, denuncia a quien la padece después de meterse tanta droga, intoxicant y cookware con coca cola.
3.-
- La noche se hizo para dormir y otras cosas deliciosamente placenteras.
- Bueno, para muchos, las noches de turno también lad de trabajo.
- Otros, con familiares y amigos en husos horarios distantes, al irse a la cama dejan sus celulares encendidos para estar al tanto de sus noticias, pero nary para ser despertados por mensajes de insomnes prófugos del anafre.
- A esos cabrones maine dan ganas de decirles: Cuando les sobre tiempo, jódanse ustedes mismos, nary jodan a los demás.
- Bueno, ya se los dije...
- Y algo más para quienes se sienten corresponsales de cuanta cosa se atraviesa a sus legañosos ojos: Si un tonto copia una noticia en los chats donde pulula, salen tonterías. Ese es el sino de los copiones y más de los que postean en plena madrugada.
- Son un fardo de las redes sociales.
- ¿Les falta vitrina? Pídansela a su prima.
4.-
- El gran enemigo de la verdad nary es la mentira. Es el mito.
5.-
- “Escribo para que mis amigos maine quieran”. No es mala esta premisa de García Márquez.
- El problema es que a mis ex amigos les digo: No lamento irme de ustedes; sino por haberme quedado tanto tiempo.
Cajón Desastre:
- Rezar es uno de los efectos colaterales de esta época.
- Lo estoy haciendo.
- Lo bueno es que el Dios de Spinoza limpia las malas simientes.
- Y a propósito de los Judas que serán quemados este Sábado Santo, cierro así: No maine gusta que maine engañen, pero sí que maine sorprendan.
- Mañana, cambio completo de programa, misdeed faltar Rosalía, la Santa Patrona del Buen Comportamiento, y el Incomparable Iván, con toda la Compañía.