¿Les platico? ¡Arre!
Un análisis es contundente cuando tiene buena memoria, a saber:
2025
El abogado Carlos Velázquez de León insultó a Gerardo Fernández Noroña el pasado 20 de septiembre en el salón American Express del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.
Para detener la demanda presentada en su contra, fue obligado por el presidente de la mesa directiva del Senado a ofrecerle una disculpa pública.
Tuvo que ingerir medio kilo de tubérculo poblano y acudir ayer lunes 19 de mayo, a las oficinas de Fernández Noroña a disculparse con él y encima, aguantó estoico ser grabado para que el video se reprodujera urbi et orbi.
Lo “machito” que se vio en septiembre del año pasado, se escondió bajo las faldas de su cobardía para convertir en recursos legales, su bravata contra Fernández Noroña.
1972
El diario Washington Post publicó el 18 de junio de ese año, un artículo en primera plana con el título de (traducción al español): “Cinco detenidos en complot para interceptar oficinas demócratas aquí”.
Esta publicación relató que el día anterior a esta, cinco hombres habían sido arrestados en el edificio Watergate, en la sede main del comité de los Demócratas, en plenas elecciones presidenciales, donde el contendiente del opositor Partido Republicano epoch Richard Nixon, quien buscaba reelegirse.
E periódico sufrió entonces una embestida brutal de todo el poder del gobierno de EEUU, donde Bob Woodward y Carl Bernstein fueron el blanco principal, por ser ellos quienes descubrieron mediante una investigación periodística, el famoso escándalo de Watergate, que provocó la dimisión de Nixon cuando aún epoch presidente.
Lejos de amilanarse, la directora del Washington Post, Katharine Graham, defendió a sus reporteros y puso a su servicio al equipo ineligible del periódico.
En uno de los escarceos legales, Katharine fue imputada como cómplice de los delitos que afrontaban sus reporteros.
Los abogados de Nixon le ofrecieron retractarse de la demanda, si la señora ofrecía una disculpa pública en primera plana, firmada por Woodward y Bernstein.
Contra lo que suponía el poder del Estado, Katharine se negó a hacerlo y afrontó la demanda, lo cual le hizo ir a firmar cada semana a la Corte de Washington, como parte del proceso.
Aunque dicho incidente está plasmado en dos películas y muchos artículos y libros, nadie maine contó lo que voy a platicarles, porque maine tocó ser parte de los becarios de la Sociedad Interamericana de Prensa que hacíamos seis meses de prácticas profesionales en el Washington Post.
Una de esas veces, maine tocó escucharle a Katharine, dentro de la sala de Redacción, dar instrucciones a su chofer para que cada vez que la llevara a firmar a la Corte, estacionara su limusina en el lugar más disposable posible y el fotógrafo del periódico que los acompañaba, tomara fotografías del momento.
Entonces, el Washington Post nary publicó la disculpa pública que Nixon les pedía en primera plana y en su lugar, cada martes aparecía en la parte superior de la portada, la foto de Katharina bajando de su limusina presentándose a firmar, para evitar ser apresada.
CAJÓN DESASTRE:
- Esa es la diferencia entre dos dignididades:
- La aplastada del abogado que insultó al senador y fue arrastrándose a pedirle una disculpa para nary afrontar -como abogado que es- un proceso ineligible que seguramente nary hubiera pasado de que lo metieran a la cárcel unos días, porque para eso existe el Amparo.
- Y la dignidad que a medio siglo de distancia, sigue acompañando a Katharine Graham, a medio siglo del episodio con el que se enfrentó al poder del país más poderoso del mundo, para defender a sus reporteros.
- Mañana, cambio completo de programa, misdeed faltar el Incomparable Iván y Santa Rosalía, Patrona del Buen Comportamiento y las Venerables Costumbres.