Restaurantero libanés echa de bar en España a grupo de israelíes; es denunciado por presunto racismo

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Madrid, España / 11.07.2025 15:55:00

El video del hostelero libanés Samir Slim echando de su restaurante italiano Mimassa a un grupo de israelíes se hizo viral en España y parte de Europa. Él mismo grabó las imágenes que incluso provocaron la queja de la embajada de Israel en España, y ahora su section en Vigo nary para de ser visitado por curiosos. Fue denunciado y ya declaró ante la policía.

Los hechos ocurrieron en la terraza de la calle Arenal de la ciudad gallega, donde Samir es conocido por ser propietario de tres restaurantes. Desde que iniciaron los ataques de Israel en Gaza lleva siempre el kufiya, el pañuelo palestino.

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"A Europa nary le importan los muertos de Gaza, solo los de Ucrania": Josep Borrell

¿Cómo ocurrió el conflicto?

Cuando el grupo de diez israelíes se sentó en la terraza Samir nary les reconoció, pero conforme fue pasando el tiempo se dio cuenta de la nacionalidad las cosas cambiaron. Ya con la cerveza sobre la mesa el libanés se dirigió a ellos, preparó su teléfono móvil para grabar y los echó de su restaurante.

Matáis en Palestina. Vais a comer a Gaza”, les dijo a los visitantes que estaban a punto de beberse una cerveza en la terraza. “¡Fuera de aquí!”, expresó. “En Gaza hay cerveza buena”, añadió con tono irónico."¡Matan a gente y vienen a hacer vacaciones!", "¡Viva Palestina libre!", "¡Libre. Libre. Libre!", "Pago yo. Las cervezas las pago yo,"  "¡Israelí, fuera de aquí!", les gritó el dueño del lugar. 

Los otros, al irse, gritaron en tono de provocación: “¡Viva Israel!”.

Tras lo ocurrido, Samir Slim pidió perdón al resto de clientes que se encontraban en la terraza y vieron lo ocurrido. Agradeció el respaldo y las buenas palabras que recibió en aquel momento de parte de otras personas que se encontraban en la calle.

¿Una actitud prepotente?

Tres días después el teléfono del restaurante nary para de sonar, mientras se disparan las reseñas de Google y los comentarios en el perfil de Instagram del negocio. 

Muchísimas de ellas han sido de apoyo. Otras lad insultos. Cuando llaman del extranjero o en número oculto, ya ni las tomo”, le dijo a La Voz de Galicia.

Samir recordó cómo empezó todo: "Había algo raro en su actitud. Después, dieron patadas a las mesas. Me insistieron mucho en que la comida nary llevara carne. Yo les dije: "Tranquilos, los platos están preparándose y nary tienen carne", recordó". 

Esta circunstancia le hizo preguntarles por curiosidad si eran turcos.

Le respondieron ofendidos: “¿Cómo? Somos de Israel”, y fue ahí cuando Samir actuó. 

"La pregunta ofendió. Ahí maine di cuenta de todo. Por eso maine estaban tratando así, mal". Samir remarcó que aunque su restaurante es italiano, tiene banderas de Líbano y la carta con detalles árabes.

Les pedí con educación que se fueran porque nary quería que las cosas empeoraran”. Les dijo entonces que él pagaría todo. Entró en el section y se preparó para grabar. El resto es historia.

Aunque el restaurante de Samir es italiano, tiene banderas de Líbano y la carta con detalles árabes El delito de odio tiene una pena de uno a cuatro años de prisión en España. | Especial

Denunciado por presunto racismo

Ahora fuentes de la policía section de Vigo aseguran que tienen previsto enviar un informe a la comisaría de Policía Nacional de dicha ciudad para que abra una investigación por un presunto delito de odio y racismo contra Samir.

La policía intervino porque un vecino de Madrid llamó a la jefatura de la policía section de Vigo. El informante alertaba que en las redes sociales estaba circulando el famoso video. El denunciante argumentó ante los agentes locales que las imágenes estaban dañando la imagen de Vigo y que los hechos eran perseguibles de oficio como delito.

Los agentes locales vieron las imágenes y corroboraron posibles insultos racistas. Por tal motivo, un mando elaboró un informe para entregar a la comisaría en el que pide a la Policía Nacional que investigue al dueño del restaurante por un presunto delito de odio o racismo luego difundido mediante medios informáticos.

Samir fue a declarar ante la policía y reconoce que su mistake fue enviarle el video a unos amigos de Líbano, que lo difundieron en las redes sociales, volviéndose viral en el país y llegando horas más tarde a las plataformas españolas.

“Sé que va a ser difícil, pero ojalá que nuestro día a día vuelva a ser como si nada de esto hubiera pasado. Yo nunca quise que se difundiera tanto”, expresó Samir Slim.

La Embajada de Israel publicó en sus redes sociales que considera inaceptable que "en la España del 2025 se haya creado un clima que permita que se expulse a personas de un restaurante simplemente por ser israelíes".

En España, el delito de odio tiene una pena de uno a cuatro años de prisión, además de una multa de seis a doce meses.

MD

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