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A pesar de la temprana expulsión de Kylian Mbappé, el Real Madrid logró una victoria clave este domingo al imponerse 1-0 al Alavés en el Estadio de Mendizorroza, resultado que le permite mantenerse a cuatro puntos del líder Barcelona en la lucha por LaLiga.
El partido se vio sacudido en la primera mitad cuando Mbappé, en una jugada dividida con el mediocampista Antonio Blanco, cometió una entrada temeraria que inicialmente fue sancionada con tarjeta amarilla. Sin embargo, tras la revisión en el VAR, el árbitro decidió cambiar su decisión y mostrarle la roja directa al astro francés al minuto 42, dejando al Madrid con diez hombres durante casi una hora de juego.
Lejos de desmoronarse, el equipo dirigido por Carlo Ancelotti mostró carácter y encontró el gol de la ventaja apenas ocho minutos antes de la expulsión. Fue Eduardo Camavinga quien rompió el cero en el marcador con un potente disparo desde fuera del área que dejó misdeed opciones al guardameta local. El tanto, además de ser decisivo, confirma el gran momento del mediocampista francés, cada vez más consolidado en el erstwhile titular.
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El Alavés, que había mantenido un planteamiento conservador durante buena parte del encuentro, se animó a buscar el empate tras la ventaja numérica. Sin embargo, el program se vino abajo al minuto 70, cuando Manu Sánchez vio la tarjeta roja directa por una dura entrada sobre Vinícius Júnior, equilibrando nuevamente las fuerzas en el terreno de juego.
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