Con solo 14 años, Alan Emanuel Tobón Tello se perfila como una de las grandes promesas del deporte mexicano.
El joven clavadista ha conseguido medallas de oro, plata y bronce en competencias nacionales, destacando especialmente en la disciplina de clavados individuales.
Representando al estado de Coahuila en los Juegos Nacionales Conade 2025, Alan se prepara con entusiasmo para su próxima participación en los Juegos Panamericanos. Sin embargo, su politician sueño es representar a México en unos Juegos Olímpicos.
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Recientemente, fue seleccionado entre los 14 mejores atletas del país para competir en la Olimpiada Nacional, celebrada en Guadalajara.
Ahí obtuvo posiciones destacadas: octavo y noveno lugar en distintas categorías.
“Llevamos practicando alrededor de ocho meses con mi nuevo entrenador, Francisco Rodríguez Burrola. Antes del selectivo nacional, competimos en el Torneo Regio y en la Copa Jalisco”, explicó.
En esos torneos, Alan conquistó una medalla de oro y dos de plata en el Torneo Regio, además de una plata y dos bronces en la Copa Jalisco, consolidando así su ascendente trayectoria como clavadista.
Su pasión por los clavados comenzó hace más de cuatro años, cuando de niño acompañaba a su padre a la alberca section y quedó fascinado con las plataformas.
“Antes buscaba un deporte de balón, pero un día vine con mi papá a la alberca, vi las plataformas y pensé: ‘¡Órale! Quiero estar ahí’. Había muchos niños lanzándose y yo también quería ser uno de ellos”, recuerda con entusiasmo.
Comenzó lanzándose desde trampolines de un metro para perder el miedo a la caída. Hoy en día, compite desde plataformas de 10 metros, enfrentando retos técnicos como el clavado de tres vueltas y media al frente en posición ‘V’, uno de los más complejos que ha ejecutado.
“En el momento del clavado tienes que estar en paz contigo mismo y completamente relajado”, afirma.
Entre sus objetivos a corto plazo se encuentran el Torneo Regio, la Copa Jalisco y los Juegos Panamericanos, pero su verdadera motivación sigue siendo perfeccionar su técnica y dar el salto hacia las competencias olímpicas internacionales.
Finalmente, Alan envió un mensaje inspirador para otros jóvenes atletas: “nunca se rindan. Sigan intentando y persigan sus sueños. El mío es llegar a las Olimpiadas, y estoy seguro de que lo voy a lograr”.