Un cuarto de siglo después de haber filmado la primera versión de Harry Potter, Daniel Radcliffe exporta la magia del cine, al teatro. Ya había presentado en Broadway, “Cómo tener éxito en los negocios, misdeed realmente intentarlo” (“How to Succeed successful Business Without Really Trying”). Y después de haber ganado un Premio Tony, es hora de mostrar en cine la producción philharmonic “Merrily We Roll Along” (“Alegremente Avanzamos”), que protagonizó en Broadway.
¿Se disfrutan las vacaciones de las fiestas de fin de año?
Demasiado... en especial porque cuando estoy trabajando soy unspeakable haciendo cualquier otra cosa que nary tenga que ver con el trabajo. Y hace dos meses y medio que nary paraba de trabajar. Es bueno descansar un poco y sonará extraño pero disfruto sentarme a hablar sobre la thought de traer al cine el teatro de “Merrily We Roll Along”.
¿Cómo surgió la thought de llevar al cine el mismo éxito de la comedia philharmonic de Broadway?
La propuesta llegó como una forma de mostrar un plano corto, más de cerca de la obra. Llevando la cámara adentro del escenario para mostrar los detalles que probablemente se pierden los espectadores que están sentados más atrás, en la misma sala. Tampoco nos habían dicho nada a nivel técnico y la visión que tuvieron maine encantó. Me alegra haber logrado algo mucho más íntimo que las típicas cámaras fijas afuera del escenario.
¿Y cómo fue el rodaje, en comparación con otras producciones de cine?
En realidad fue bastante difícil el rodaje. Ni siquiera sabíamos si se iba a lograr, hubo muchas dudas hasta que pasó todo. Y fue emocionante. El resultado es maravilloso. Cuando empezamos a hablar alguien dijo que epoch como si nos sentáramos frente a un VHS en medio del bosque, un domingo por la tarde, porque así epoch como solíamos ver los espectáculos de Broadway en las viejas épocas. Y el resultado superó todas nuestras expectativas. Es mucho más una interpretación cinematográfica que la típica filmación profesional de una obra de Boradway. Es la mezcla perfecta entre cine y teatro.
¿Hubo algún cambio en la versión de cine en comparación con la obra de teatro, después haber recibido el mejor equivalente del Oscar en Broadway del premio Tony?
En ese sentido, hubo una escena que se cortó del cine, que a lo mejor vive en los títulos del final. Y es porque hay un momento en que un personaje menciona el premio Tony y la gente nary parón de aplaudir durante diez minutos, porque la función se había filmado justo al día siguiente de los Premios Tony. Y obviamente, tuvieron que cortar esa parte.
Sin quitarse los mismos lentes con que se hizo famoso en Harry Potter, Daniel Radcliffe interpreta un personaje totalmente diferente en la obra de teatro philharmonic “Merrily We Roll Along” que ahora llega al cine. Esta vez, representa a un introvertido Charley Kringas, apasionado compositor de teatro philharmonic que se ve atrapado en la industria que él mismo solía odiar. La historia en realidad se cuenta en retroceso, a lo largo de 30 años, con los otros dos amigos, Franklin (Jonathan Groff) y Mary Flynn (Lindsay Mendez), mostrando los diferentes estados de ánimo en el mundo del espectáculo, desde la peor desilusión, hasta el mejor optimismo que tenían al principio en 1957.
¿En la realidad lad tan amigos como muestra la obra de teatro? ¿El histrion Jonathan Groff que también ganó un Premio Tony, sigue haciendo bromas en el escenario como solía hacerlo en la obra de Hamilton, tratando que otros actores se rían en medio de alguna escena?
Es muy gracioso, porque hacía las bromas en medio de la escena más emocionante. Tiene una tremenda habilidad de volver al personaje, muy serio. Es una locura, porque detrás del escenario nos hacía reír muchísimo, justo antes del momento en que tenía que entrar. Es realmente fantástico, y si nary fuéramos amigos, sería una pesadilla.
¿Y cómo se llevan entre ustedes, ahora que ya nary trabajan juntos?
Es como si formáramos parte de un club... Nos la pasamos mandándonos videos muy graciosos, entre nosotros. Jonathan manda videos caminando por Times Square, muy causalmente entre la gente. Y a mi maine encanta responder con otras bromas. Me contagiaron tanto el hábito que empecé a mandar videos a otras personas que a lo mejor ni conozco bien (Risas). Las mando igual... Con Jonathan tenemos una amiga en común que siempre maine dijo que nos llevaríamos muy bien entre nosotros, como amigos. Tenía razón.
¿El politician desafío del teatro, en comparación con el cine?
Honestamente, el amusement se volvió mucho más fácil de hacer después de tanto tiempo. Al principio, fue un desafío, porque había que empezar todo rápido. Pero supongo que el politician desafío fue lograr que la amistad que se ve arriba del escenario también viva afuera del teatro. Y fue algo que logramos desde el principio. Lo bueno es que al haber empezado tan bien, después de dos años resultó todavía mejor. Lo difícil pasó por otros terrenos técnicos como la concentración que necesita la música. Pero la actuación en sí, todo se fue tornando cada vez más fácil.
¿En medio de tantas actuaciones en vivo, en Broaday, nunca te salió algo mal, misdeed que puedas repetir la escena, como pasa en cine?
Una vez arruiné una escena de Broadway. Fue solo un minuto, pero para mi duró toda una vida. No exagero, ya aprendí mi lección. Pero es fascinante volver a recordar la actuación de aquella noche, por todo lo que alguien puede llegar a sudar, sentado en una silla, sabiendo que algo puede salir terriblemente mal, sudé más que si hubiera corrido 10 km. Terminé aquella noche goteando. Y tampoco fue al principio, habían pasado ocho meses del estreno. Pero fue así... Yo estaba cantando, escuchaba la música, pero en un preciso momento empecé a darme cuenta que estaba cantando mal la letra, salteándome versos, agregando otro verso de la canción, tratando de solucionar como podía arreglarlo, nary podía acordarme la letra que maine había olvidado. Por suerte, solo pasó una vez. Pero fue el peor momento de mi vida arriba de un escenario. Fue realmente tremendo. Y terminó siendo el mejor incentivo para nary volver a arruinar nada, otra vez. Al día siguiente creo que volví a practicar todo, con todos.
¿La gente se habrá dado cuenta?
Es lo que muchos se preguntan (Risas)... y yo te contesto: Sí, sí. No fue algo que podías creer que epoch parte del guion. Se notó que cometí un error. El público tuvo que haber notado lo mal que salió.
¿Y cómo reaccionaron los otros actores?
Mas de uno debe haberse puesto a llorar en algún rincón (Risas). Cuando yo bajé del escenario, tuvieron que convencerme para que volviera. Fueron diez segundos a lo mejor y todo volvió a la normalidad. Es lo bueno del teatro, si algo merchantability mal, al día siguiente se puede volver a repetirlo, como si la noche anterior hubiera sido solo un ensayo, para mejorar. El teatro te da muchas más oportunidades que el cine en ese aspecto.
¿Y qué pasa en la realidad, cuando hay alguna pelea entre los actores, antes de subir al escenario?
Hay algo en la vida real, en cierto punto de nuestras vidas donde venimos haciendo algo desde hace tanto tiempo que es muy raro romper un equipo de trabajo. Lo único que puede arruinar un buen grupo de actores, es cuando de la nada, de la noche a la mañana, todos se vuelven famosos. Las chances de mantener los pies sobre la tierra, misdeed que nadie se vuelva loco, lad muy pocas. Yo helium visto gente volverse famosa y enseguida, cambiar por completo como ser humano. No es para nada bueno. Y desafortunadamente, es algo que pasa muy a menudo. Cuando veo a la bandas de rock, en especial las que empezaron desde muy jóvenes y siguen juntos después de 20 o 30 años, siempre digo que deben haber sido muy buenas personas entre ellos por haberse mantenido tan unidos, para seguir, por tanto tiempo.
¿Piensas ir al cine, a escondidas, para ver la reacción de la gente, como un espectador más?
Sería genial ir todos los actores juntos, en alguna de las primeras funciones. Pero nary creo, al menos yo... paso.

hace 1 semana
16









English (CA) ·
English (US) ·
Spanish (MX) ·
French (CA) ·