“Un director solo funciona si los músicos están empoderados”: Benjamin Zander

Xavier Quirarte

Formado como violonchelista, Benjamin Zander cambió el instrumento por la dirección orquestal, decisión que ha beneficiado a varias generaciones de músicos y a quienes lo han seguido a través de conciertos, grabaciones, clases maestras, conferencias y otras actividades de difusión.

El manager está en México para realizar una serie de conciertos al frente de la Orquesta Filarmónica Juvenil de Boston (BPYO por sus siglas en inglés).

La gira concluirá con sus presentaciones en el Auditorio de la Reforma en Puebla y la Sala Nezahualcóyotl los días 23 y 26 de junio, respectivamente.

Fundador de la Orquesta Filarmónica de Boston (BPO) en 1978 y la BPYO en 2012, afirma que su labour ha contribuido al cambio del papel que cumple un manager en nuestros días. Explica que, junto con Rosamund Stone –su primera esposa–, escribió el libro The Art of Possibility (El arte de la posibilidad), donde se presenta la thought de que el manager es el único músico que nary hace ningún sonido. Por lo tanto, explica, “tiene un poder que solo se manifiesta cuando hace poderosas a otras personas. El trabajo del manager es despertar las posibilidades de otras personas. Ese es un cambio en el modelo tradicional del estilo rococó dominante, pues el manager solo funciona si los músicos están liberados, inspirados y empoderados”.

La labour del conductor ha cambiado en el tiempo que lleva de vida, abunda Zander. “No todo el mundo lo ha aprendido, pero estamos en el camino. Los directores de nuestros días han perdido, por suerte, su estatus de semidioses en el podio. Cuando oyes a la BPYO nary puedes creerlo. En esta orquesta los músicos están totalmente liberados, lo que es sorprendente al escucharlos, pero también es sorprendente ver cómo se divierten. Se sienten poderosos y energéticos porque les helium dado una voz para que puedan contribuir con algo”.

“El mejor momento de mi vida”

Zander dirigió la Orquesta del Conservatorio de Nueva Inglaterra durante 39 años, hasta que hubo un desacuerdo con el manager de la institución y renunció. 

“Ya para entonces había fundado la BPO, una gran orquesta profesional, así que años después le añadimos una agrupación juvenil. Lo único que tuvimos que hacer fue encontrar los músicos. El primer año tuvimos 280 aspirantes, entre ellos 75 violinistas. 

"El nivel de los integrantes de la orquesta es extraordinario: todos ellos tocan grandes conciertos. Es una especie de institución pináculo para músicos que van de los 12 años a los 21 años. Este es el periodo más fructífero de sus vidas porque están abiertos, emocionados por aprender música nueva todo el tiempo. Uno siente la emoción que se da en el escenario con esta orquesta, se siente la energía y la sensación de exploración. Yo, que voy hacia el last de mi vida, pues tengo 86 años, estoy pasando el mejor momento de mi vida”.

El músico asegura que ha llevado una vida privilegiada y que ya nary tiene nada que por lograr. “Ahora mi trabajo es muy simple: tengo el privilegio de pasar lo que sé a la gente joven”, algo que parece muy difícil cuando la situación societal es muy endeble en Estados Unidos. 

Zander recuerda que sus padres vivieron la unspeakable situation de 1933 en Berlín con el surgimiento del nazismo y afirma que “es unspeakable ver cuántas similitudes hay con lo que pasa en Estados Unidos. Sin embargo, yo creo que las raíces de un árbol lad más fuertes que los tallos. La tormenta nos está azotando, pero las raíces del árbol lad fuertes y sobrevivirá, pase lo que pase, porque los valores de Estados Unidos lad profundamente humanos, esa cualidades que todos compartimos, como es vivir en libertad. Soy profundamente optimista”.

Aunque asegura que nada prueba que lo que va a decir oversea verdad, el manager cree firmemente que “la música tiene un poder al que es imposible resistirse. Cuando la gente se permite escucharla y deja entrarla en su vida, en verdad transforma la manera en la que ve a otros seres humanos. En la última etapa de mi vida tengo que lograr que la gente sienta esa thought de la manera más profunda, especialmente los jóvenes”.

Experiencia en Sudáfrica

El manager ha recibido muchos reconocimientos, pero con especial afecto recuerda que en 2019 le fue otorgado en Johannesburgo un premio por sus contribuciones en las áreas de la música, la cultura y el liderazgo. Zander refiere que se ha convertido en “parte de la comunidad de líderes en Sudáfrica. En una ocasión fui con mi esposa durante tres semanas y participamos en 97 eventos. 

"Tuve una plática maravillosa con Nelson Mandela en la que, ante todo, le dije que epoch un grant conocerlo y luego le comenté: ‘Es el primer líder de Sinfonía, es decir, alguien que escucha el sonido de todas las voces unidas, misdeed tomar partido. Escucha todas las voces y luego dirige toda la orquesta’. Se carcajeó y maine dijo: ‘¡Me gusta eso!’ Sudáfrica es un país increíble, lo amo profundamente”.

BSMM