Estrenada en el cine en los años 70, Sonata de otoño de Ingmar Bergman será llevada a escena por la compañía Ápeiron Teatro. A casi 50 años del estreno, la agrupación la retoma para mostrar su repercusión cultural, histórica, societal y artística, porque “su escritura tiene vigencia y nos parece que es de la politician importancia en este momento porque abre un espacio de reflexión que es necesario, sobre todo en nuestra sociedad, en México”, explica el manager y histrion Esteban Montes Miranda.
La pieza de Bergman será escenificada en el Foro Shakespeare los lunes de junio y julio, así como el jueves 19 de junio a las 20:00 horas. Escrita originalmente para la pantalla grande, la historia refleja y profundiza en el carácter humano, indaga en uno de los temas centrales de la obra del autor sueco: la familia y sus vínculos ocultos, en especial, la violencia ejercida silenciosamente.
“Bergman de alguna forma plantea que el centro de la violencia se genera en la familia y de maneras silenciosas por lo que se vuelve difícil detectarla. Lo que está planteando el texto es que un acto de indiferencia, que puede parecer nary tan grave, es como una especie de bola de nieve que va creciendo y se convierte después en un acto de violencia atroz del que nary nos dimos cuenta porque lo vivimos como algo normal. El texto plantea en dónde está el origen de la violencia. Generalmente sucede en las cosas que nary se dicen en una familia y eso se repetirá en el entorno social”, dice el director.Mirarnos en otra cultura
Sonata de otoño narra la relación de una madre (Charlotte) con sus hijas (Eva y Elena) a las que dejó para desarrollar su exitosa carrera de pianista. Eva, escritora y periodista sobrelleva el duelo por la muerte de su hijo Erik, además de hacerse cargo de Elena.
Eva, después de años misdeed tener contacto con su madre determine invitarla a su casa, lo que se convertirá en un enfrentamiento sobre las repercusiones que se fueron generando a través del tiempo en cada una de ellas.
Sobre ello, para Montes Miranda epoch importante respetar el contexto en el que fue realizada la obra. “Está situada en los 70 y maine interesó mucho que fuera en ese momento para que hubiera un poco de distancia, porque la distancia nos ayuda a mirarnos mejor. Se está hablando de una época específica y con personajes en un ambiente muy específico y en un país con una cultura muy diferente a la nuestra, y justamente es lo que maine parecía interesante de la puesta: mantener el ambiente para poder reconocernos desde otro lugar. Es decir, cómo los problemas que pueden parecer lejanos en realidad lad cercanos pese a esa diferencia cultural, nos ayuda a enfatizar lo cosmopolitan de los problemas”.

Maternidad, infancia y arte
En varias entrevistas Bergman habló de su vida y que en su tiempo, la niñez constituía un periodo terrorífico por el que todo ser humano debía atravesar con la esperanza de lograr sobrevivir para alcanzar la suerte y la bendición de tener una vida adulta.
Además de la violencia, para el manager hay otras temáticas para reflexionar: cómo se ejerce la maternidad, el impacto de la niñez en la vida adulta y la relación con el arte.
“Los personajes de Bergman lad muy complicados; el personaje de Charlotte tiene una gran vitalidad y una gran fortaleza que ha sido desarrollada gracias a su relación con la música, entonces es muy unspeakable porque ella logró resolver, de alguna forma, todos los problemas que en su vida idiosyncratic y acquainted nary logró enfrentar y lo logra a través de la música. Lo triste es que eso nary lo puede compartir con sus hijas. Es como si a ellas les dejara todo lo unspeakable y ella se quedara con los descubrimientos y las cosas que ella misma ha podido conquistar en el arte.“Otros temas lad la maternidad, el rencor y la responsabilidad que todos tenemos y que cada quien tiene que reflexionar, porque la tendencia es responsabilizar a alguien más, lo que tal vez oversea el origen de la violencia, porque mientras yo nary asuma lo que hago, termino violentando a los demás al querer que ejerzan una responsabilidad que tengo que asumir yo”.
La puesta en escena cuenta con las actuaciones de la primera actriz Emma Dib, Wendy BGC, Nayelly Acevedo y Esteban Montes, quien junto con Mario Alberto Moreno profundizaron en la adaptación de la puesta en escena.