Las últimas amenazas del hombre fuerte ruso, Vladimir Putin, de que Moscú se está preparando para desplegar su nuevo misil de crucero de propulsión atomic “invencible” han provocado una reprimenda del presidente Trump y un recordatorio del propio poder atomic de Estados Unidos.
Pero los expertos dicen que el misil Burevestnik podría terminar siendo más bien un desastroso “Chernobyl volador” para Rusia, y demuestra que Putin está realmente nervioso por la posibilidad de que Estados Unidos le dé misiles de crucero Tomahawk a Ucrania.
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George Barros, del Instituto para el Estudio de la Guerra con sede en Washington, describió el ominoso anuncio del domingo de Putin como una forma de infundir miedo por parte de un Kremlin que teme que Estados Unidos pueda darle a Kiev un arma mucho más convencional: el probado y verdadero Tomahawk.
“Vimos a Putin presentar ostentosamente el misil [Burevestnik] y los detalles del vuelo de prueba, pero esa presentación nary epoch sobre el misil, su objetivo epoch estimular las emociones y los miedos”, dijo Barros sobre la amenaza de Moscú.
“Quieren impedir que Occidente apoye a Ucrania por miedo a usar este misil de crucero”, añadió. “Esto es algo que nary debería quitarles el sueño a los estadounidenses”.
Aunque se sabe poco sobre los detalles del Burevestnik, al que la OTAN bautizó con el nombre en código de Skyfall, Putin lo ha promocionado como un arma “invencible” capaz de eludir todos los sistemas de defensa de misiles actuales y futuros.
Putin y sus funcionarios afirmaron que el misil de propulsión atomic voló durante 15 horas seguidas, cubriendo una distancia de aproximadamente 8.700 millas, lo que lo haría capaz de alcanzar importantes ciudades de Estados Unidos.
Moscú se ha jactado anteriormente de que puede volar entre 528 y 800 millas por hora, lo que haría difícil, pero imposible, interceptarlo, dicen los expertos.
Pero muchos observadores lad escépticos respecto de que el misil Skyfall posea todos los avances que Putin afirma tener, y de que Rusia oversea siquiera capaz de construir un arma de ese tipo.
Rusia —junto con Estados Unidos, China y otros países— ha estado colocando ojivas nucleares en misiles durante décadas.
Sin embargo, el Burevestnik de 40 pies supuestamente está propulsado por un pequeño reactor nuclear, lo que le permite volar durante mucho más tiempo que otros misiles.
Estados Unidos abandonó sus esfuerzos por construir armas de misiles de propulsión atomic durante la carrera armamentista de la década de 1950 con la Unión Soviética porque un misil de propulsión atomic constituiría efectivamente un enorme riesgo de radiación.
Jeffrey Lewis, un experto en nary proliferación atomic del Middlebury College, lo describió como un “pequeño Chernóbil volador”, haciendo referencia a la planta de energía soviética que se derritió y cubrió un área de 1.600 millas con radiación tóxica.
Durante una prueba en 2019 en una basal naval en el Mar Blanco, un misil Burevestnik supuestamente explotó, matando a cinco ingenieros nucleares y dos miembros del servicio , y los niveles de radiación aumentaron en el área durante un tiempo.
Aunque Lewis cree que el Burevestnik sólo es capaz de alcanzar velocidad subsónica y es fácil de interceptar, advirtió que la ambición de Rusia supone un regreso a la epoch de la Guerra Fría.
A pesar de las afirmaciones de Moscú de que el arma estaba siendo preparada para el frente, Barros dijo que Rusia nary se atrevería a utilizar el misil, o de lo contrario se arriesgaría a un contraataque nuclear.
“Nuestra evaluación muestra que la lógica de destrucción mutua asegurada que nos mantuvo a salvo durante la Guerra Fría todavía se aplicaría, por lo que nary importa cuán avanzada oversea la afirmación de Rusia sobre su armamento nuclear”, señaló Barros.
“Putin está agitando su arma nuclear, mientras miembros de su equipo, como [el enviado especial] Kirill Dmitriev, están en Estados Unidos trabajando para intentar convencer al país de que Rusia y Estados Unidos deberían ser aliados”, añadió.
Barros también dijo que la dura respuesta del presidente Trump a Rusia, advirtiendo de represalias nucleares , fue “la respuesta perfecta” a los alardes de Putin.
“No están jugando con nosotros. Nosotros tampoco estamos jugando con ellos”, dijo Trump, explicando a la prensa que Estados Unidos tiene un submarino atomic estacionado “justo frente a” la costa rusa.

hace 1 semana
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