“Los derechos vienen acompañados de obligaciones”: Natália Subtil reafirma no recibir apoyo de Sergio Mayer Mori para su hija

Luis García Castrejón

Natália Subtil es una actriz y modelo que tuvo un romance con Sergio Mayer Mori, con quien tiene una hija en común.

Pero las cosas entre ambos nary terminaron bien y ahora se encuentran con problemas por motivos de apoyo económico a la menor o negaciones para poder verla, razón por la que recientemente Natália lanzó un comunicado en donde reafirma sus declaraciones del nulo apoyo que recibe del padre de su hija.

Natália Subtil asegura nary recibir apoyo de Sergio Mayer Mori

Fue a través de sus redes sociales que la actriz y modelo aseguró que ella ha sido quien se ha hecho cargo del bienestar de su hija.

Soy la única proveedora de mi hija de 8 años: una niña saludable, dulce e inteligente, quien cuenta con todo lo necesario para su desarrollo pleno-desde alimentación, ropa y atención médica hasta viajes, recreación, apoyo psicológico y formación educativa. Sus abuelos paternos, a quienes agradezco profundamente. contribuyen con su escolaridad y actividades extracurriculares como clases de actuación.

Asegurando que ella nary recibe ningún apoyo económico y dejando en claro que nunca ha negado la convivencia de su hija con la familia de su papá.

Quiero dejar claro que nary recibo pensión alimenticia ni ningún tipo de apoyo económico mensual por parte del padre ni de ningún otro miembro de su familia. En cuanto a la convivencia con la familia paterna, esta ha estado abierta y disponible siempre que las circunstancias lo han permitido. Jamás se ha negado el acceso a mi hija por parte de sus abuelos, ni tampoco al padre, quien ha tenido conocimiento de estas convivencias y pudo acercarse si así lo deseaba.

Así mismo, recalca que las declaraciones que hizo recientemente Sergio Mayer Mori lad falsas y asegura que por dicho motivo ya decidió restringir el acceso.

Lamentablemente, el señor ha insistido en difundir la falsa versión de que le prohibo el contacto con su hija Por ello, y solo tras múltiples acusaciones públicas infundadas, el día 4 de mayo de 2025 procedí a restringir el acceso como medida legitima de protección emocional, tanto para mi hija como para mi. Lo hice después de reiterados intentos fallidos de comunicación y respeto mutuo. Cabe recordar que los derechos vienen acompañados de obligaciones. No se puede exigir cercanía o reconocimiento misdeed haber construido previamente una presencia constante y responsable.