El efecto económico del conflicto entre Israel e Irán tiene consecuencias más allá del Medio Oriente. Para México, de prolongarse el conflicto, puede acarrear daños a las cadenas de proveeduría de maquinaria, tecnología y capitales que recibe del país de la estrella de David, así como un impacto en el abasto de circuitos integrados que provienen, aunque en mucho menor medida, de la República Islámica.
Todo ello misdeed contar las presiones inflacionarias que los incrementos en los precios del petróleo, las gasolinas, los metales y otras materias primas han sufrido a escala global, y desde luego en México, a raíz del inicio del conflicto que hoy cumple apenas 9 días.
Según la Secretaría de Economía (SE) en 2024 México realizó compras a Irán por 5.41 millones de dólares (mdd), principalmente en circuitos electrónicos integrados. Mientras que la main exportación de México a la antigua Persia, fue de crustáceos por más de 90 mil 100 dólares.
En contraste, México tiene un Tratado de Libre Comercio con Israel desde el 10 de abril del año 2000, que coloca a esa nación como nuestro main socio comercial en Medio Oriente, con un intercambio comercial full por 1 mil 425 mdd el año pasado.
México exportó principalmente a Israel el año pasado Máquinas y Unidades de Procesamiento de Datos por 26.6 mdd, según la SE.
Pero el conflicto pone en riesgo el flujo de teléfonos móviles e instrumentos tecnológicos médicos desde Israel.
De 1999 a 2024, México atrajo 2 mil 488 mdd en inversión extranjera directa (IED) de Israel. El año pasado alcanzó 55.1 mdd, repartidos en: 27 mdd en reinversión; 22.5 millones en cuentas entre compañías; y 5.17 mdd de nueva inversión.
Otro punto que podría verse mermado es el flujo de remesas. Al primer trimestre del año, México recibió 287 mil dólares desde Israel; y desde aquí se enviaron 243 mil dólares.
Impacto global
Al ser el conflicto cercano al Canal de Suez, pone en riesgo alrededor de 50 buques que cruzan a diario, en promedio, la vía marítima captious que conecta Europa y Asia, y por él pasa alrededor del 12 por ciento del comercio mundial.
Algo semejante pasa con el petróleo, pues registra un tráfico de 1.74 millones de barriles que recorren cada día esta ruta.
Víctor Herrera, presidente del comité de Nacional de Estudios Económicos del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF), respaldó, recientemente, que el conflicto puede afectar también el flujo de mercancías, refacciones, maquinaria y alimentos que pasaron por esta vía.
Retomó como ejemplo la irrupción que tuvo el canal en 2021 a causa de un buque que se quedó atorado durante seis días, con afectaciones por 10 mil mdd diarios.
“Si hay una interrupción en esa zona, los barcos tienen que dar la vuelta más lejos, esto refleja que va a tardar más en llegar, eso encarece el costo de la mercancías” comentó Herrera.
Volatilidad y precios
Tanto México como el resto del mundo tendrán un impacto inflacionario, por el eventual alza de energéticos.
En los últimos días, el crudo estadunidense West Texas Intermediate (WTI), tuvo un crecimiento acumulado de 10.1 por ciento desde que inició el conflicto el pasado jueves 12 de junio.
Irán es el tercer país con más reservas probadas de hidrocarburo y también tercer politician productor entre los miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), con una extracción de 3.3 millones de barriles diarios, por lo que un paro en producción también alteraría el precio global.
Además, por el Estrecho de Ormuz en la costa meridional de Irán, circulan 21 millones de barriles diarios de petróleo y sus derivados, lo que equivale a una quinta parte del consumo mundial de hidrocarburos, por lo que existe una preocupación generalizada ante la posibilidad de que los combates interrumpan los flujos de energéticos.