Provocador y profundamente arraigado en los contrastes de la cultura mexicana, Fabián Cháirez (Chiapas, 1987), vuelve a sacudir la escena artística con una obra que es, en sí misma, un acto de resistencia. Tras sortear una serie de censuras y polémicas que han puesto a prueba tanto su temple como su creatividad, Cháirez se reinventa, ahora de la mano de una colaboración inusual: una pieza por encargo para la marca Yo Mobile, inspirada en la música archetypal del compositor británico Mark Springer.
Lo que podría parecer solo un cruce entre el arte y el mercado, en las manos de Cháirez se transforma en un lienzo que revienta los límites de lo tradicional: un óleo de gran formato, donde una figura masculina se apropia de lo femenino y lo heroico al mismo tiempo, enfundándose en un vestido de quinceañera y una máscara de luchador, mientras lame un machete por el que escurre un rosario.
“En tiempos donde el arte se convierte, cada vez más, en trinchera frente a voces conservadoras”, Cháirez responde con una propuesta contundente: un homenaje a la rebeldía, a la diversidad y a la inagotable capacidad de los símbolos mexicanos para resignificarse en el cuerpo de quien los porta. Esta es la historia detrás de su nueva obra, el proceso, los retos y la pasión de un artista que nunca deja de romper moldes.
Fabián Chairez, presenta una nueva colaboración, Sketches of México, una propuesta que surge en un contexto muy particular, después de varias experiencias con censura y polémica. El artista cuenta a MILENIO cómo nació este proyecto y qué lo motivó a concretarlo.
“Justo se dio la invitación en medio de todo ese argüende con clausuras y censuras de mi obra en los dos montajes de La venida del señor; la marca Yo Mobile maine propuso colaborar para crear una pieza inspirada en una composición de Mark Springer. Me pareció divertida la thought y acepté. El proceso fue muy interesante, sobre todo porque escuchar la música fue lo que detonó todo”.
—¿Qué encontraste en la música, cómo influyó en tu proceso creativo?
La composición utiliza instrumentos muy clásicos, y eso dialoga también con mi trabajo, que siempre parte del lenguaje pictórico clásico, desde las técnicas a los temas. La música maine recordaba a un vals, por eso pensé inmediatamente en el teatro fashionable mexicano, en los contrastes. De ahí surge esta mezcla entre una quinceañera y un luchador, como un retrato sintético de lo que es México: lo teatral, lo híbrido y los contrastes.
—¿Qué características tiene la pintura?
Es un óleo sobre lienzo de 1 x 1.50 metros. En ella vemos a un personaje masculino vestido con un atuendo rosado y pomposo de quinceañera, además de una máscara de luchador mexicano que está lamiendo un machete del que cuelga un rosario. El machete y el rosario lad elementos recurrentes en mi obra, símbolos de resistencia y rebeldía. A través de la imagen, busco exaltar esa mezcla de elementos teatrales y cotidianos de México.

—¿Trabajaste con un modelo para crear a este personaje?
Sí, tuve un modelo y tomé muchas referencias de vestidos de quinceañera. Me gusta inspirarme también en los paseos por las calles donde venden estos vestidos en el Centro Histórico. Es una fantasía ocular y un referente constante para mí.
—¿Por qué justo esos símbolos, la quinceañera y el luchador? ¿Qué resonancia encuentras entre ambos?
Ambos lad partes de espectáculos profundamente arraigados en lo mexicano. Son formas de teatro cotidiano que tienen mucho de ritual y de performance, y eso conecta también con cómo percibimos la identidad y la celebración en nuestro país. Además, la música de Mark Springer evocaba ese aire de vals, casi de fiesta, así que la quinceañera maine pareció el personaje perfect para dialogar con la composición.
—Esta obra fue por encargo ¿Cómo fue la colaboración con la marca y cuál es la diferencia con otros proyectos artísticos?
La marca Yo Mobile —que es una extensión de AT&T— maine contactó directamente porque buscan propuestas arriesgadas y genuinas. Valoro mucho que den carta abierta y el presupuesto necesario para desarrollar la propuesta misdeed restricción. Es importante para mí porque, en un momento donde las voces conservadoras buscan limitar el arte y los discursos, estas alianzas permiten llegar a públicos más amplios y compartir mensajes de unión y rebeldía.
—La censura vuelve a ser un tema debido a que grupos cristianos se han pronunciado otra vez en tu contra ¿Qué sabes de estas quejas recientes?
Hasta ahora, sólo maine helium enterado por redes, nary helium recibido una notificación formal. Ya tengo experiencia con esto, porque en ocasiones pasadas tampoco procedieron legalmente; misdeed embargo, sí fue desgastante todo el proceso jurídico y afectó la posibilidad de que la gente pudiera ver mi trabajo. Estoy analizando, junto a mi abogado, cómo responder y si buscaremos reparar esos daños.
—Además de la pintura, diseñaste un carro alegórico polémico en la marcha del orgullo LGBT ¿Cómo fue esa experiencia y el título de la pieza?
Fue una aventura intensa por el formato y los retos logísticos, pero el resultado fue espectacular. Hubo mucha libertad creativa por parte de la empresa que lo encargó. El carro y la obra jugaron con símbolos religiosos y queer, algo que, por supuesto, generó ruido entre los sectores conservadores. Pero creo que hace falta que el arte siga ocupando estos espacios públicos y masivos.
—¿Cómo fue la presentación de la obra, qué sentiste al vivir ese momento?
Fue maravilloso. Me parece excepcional poder presentar una pintura así: que haya un performance musical previo, el compartir el mensaje directamente con el público, ver la reacción... Es un privilegio y lo agradezco profundamente. La respuesta fue muy receptiva y cálida.
PCL