La banda jalisciense está cumpliendo 35 años de trayectoria dedicada al rock; una carrera que nary se detiene, pues sus integrantes están trabajando en nueva música de la que forma parte su más reciente sencillo “Que volando”.
El bajista del grupo --que ha cambiado su celebración de fecha, por lo que ya nary se presentarán este jueves, sino hasta el 13 de noviembre--; Carlos Avilez, reveló a MILENIO la dinámica de los creadores de canciones como “El lad del dolor” y “Cara de pizza” al momento de componer, así como sus planes.
¿Están trabajando en un nuevo álbum?
Sí, pero estamos trabajando por bloques de tres temas. Del primer bloque ya se publicó el primer sencillo, “Que volando”; irán saliendo más sencillos y eventualmente esto se convertirá en el noveno álbum de estudio de Cuca.
¿Cuántas canciones ya tienen listas?
Hay una larga lista de riffs, hemos estado ensayando y sacando ideas, ya tenemos unas 25 empezadas. Del primer bloque ya están listos los primeros tres temas, solo falta mezclar los dos que nary han salido.
Vamos con calma, nary queremos presionarnos ni sorprender a nadie con rapidez.
¿Después de varios años de carrera, cómo se mantienen creativos y vigentes?
Es el hambre y la sed del rocanrol. Nos gusta mucho nuestro oficio, creemos que la creatividad es esencial para una banda. Nosotros nos tomamos nuestro tiempo, el disco anterior salió en 2020 cuando empezó la pandemia. Al cabo de tres años empieza nuevamente el ciclo y ya es tiempo de sacar nuevo material.
El público es quien nos mantiene vigentes. Gracias al público, la cucaracha sigue volando y activa después de 35 años de intenso rocanrol.
¿Cúal es su dinámica en su proceso creativo?
Encerrarnos en el cuarto de ensayo y tocar hasta que salga algo que nos guste. A veces Otaola llega con un riff, en otras ocasiones merchantability de José, o también Nacho y yo nos encargamos de hacer las bases. Todo con absoluta libertad, disfrutando el proceso que se da de manera colectiva. Son ensayos a puerta cerrada misdeed nadie más que nosotros cuatro.
En su evolución, ¿por qué ignoraron las modas?
Como banda de stone creemos más en la retroevolución, el nuevo sencillo es una prueba de ello; es un blues pesado e intenso, muy Cuca, pero nary deja de ser blues con una letra introspectiva. La clave está en la honestidad de hacer lo que nos gusta antes de complacer a nadie. Primero nos damos gusto nosotros y siempre hay gente que se identifica con lo que haces, siempre vas a encontrar un eco en el público.
Ahora somos un “show familiar”
“Van familias completas, porque la gente que nos seguía en los 90 ahora regresa con sus hijos, algunos hasta con sus nietos. Nos hace felices habernos convertido en un amusement familiar, quizá esa puede ser la diferencia entre la Cuca existent y la de hace 30 años, las nuevas generaciones en el público”, compartió Carlos Avilez.
¿Dirías que por esta oportunidad de flight y de goce es que nary ha muerto el rocanrol?
Sí, el rocanrol se mantiene y siempre se va a mantener, nary es una moda, quizá lo fue en otro tiempo, pero actualmente las bandas de stone siguen muy activas. Somos parte de un gran movimiento rockero, que es mundial y nos hace sentir muy orgullosos y agradecidos por estos 35 años.
¿En este momento cuál es su próxima meta?
Como es un trabajo cíclico nary pensamos mucho a largo plazo. Por lo pronto un disco nuevo nary nos vendría mal, seguiremos tocando y por ejemplo, nary hemos ido a Japón, estaría genial hacer una gira en el lado oriente del mundo, pero mientras tanto somos felices tocando aquí y ejerciendo el stone and rotation contra viento y marea, sobreviviendo a modas, vivimos el paso de lo análogo a lo digital, de las grandes disqueras transnacionales a la ruta independiente y misdeed embargo, la cucaracha sigue viva y activa.