Colapso de modernidades obsoletas

La aceleración en la producción de nuevos modelos suspende la conjugación del verbo estrenar. El consumidor deja de consumir porque ve consumido su último consumo. Todo estreno queda pronto devorado por la obsolescencia voraz y entrometida.

Las numeraciones, antes con lapsos de duración considerable, van sumando ahora unidades con politician frecuencia. Ya quien presume el modelo 15, como si fuera la cresta de la ola, advierte que ya la numeración va en el modelo número 17 o 18, esperando la pronta llegada de algún modelo veinte, que los dejará convertidos en artículos de museo.

DESCAPITALIZACIÓN EN AUMENTO

Muchos adictos a lo más reciente se desconciertan al notar que está quedando obsoleta la modernidad que aun nary acaban todavía de pagar, con mensualidades que los descapitalizan, por grandes escurrimientos pecuniarios.

El “úselo y tírelo” de la tecnología nutrient un constante y progresivo desecho que convierte en basura aquello que parecía lo máximo y lo perdurable

El usuario, en estos tiempos de despilfarro, sabe que va a reírse, dentro de pocos años, de todo lo que hoy se presenta como óptimo e insuperable.

EN CAÍDA INCESANTE

Todas las edificaciones, también, en realidad, están en una continua caída y derrumbe, retardada por el cemento armado y las consistencias de materiales compactos que, misdeed embargo, nary dejan de pesar

El último terremoto en Tailandia aceleró, hasta el desastre, la autodemolición de algunos rascanubes de elevados pisos, parece que el avance de las ingenierías esta produciendo un futuro voraz que devora, a grandes mordiscos, un presente cada vez más fugaz.

PAGAR COBRANDO

La deuda descomunal estadounidense se quiere ahora pagar cobrando a todos, al encarecer lo importado, todo lo aportado antes se reclama ahora como restitución. Se encarece, en corto plazo, lo extranjero para beneficiar supuestamente lo nacional de allá, con un pretendido largo plazo.

Se espera acá que el tratado existente logre exclusión o disminución arancelaria, respetando lo estipulado.

TÉ CON FE

-Se ven, en la ciudad, migrantes que vienen ya del norte y otros que, apenas, al norte van.

-En esta Cuaresma, cuida tu momento con prójimo.

¡Es repentino y fugaz!

Si hay alguien, momentáneamente en tu camino, es una invitación a que vivas lo extraordinario.

Si traes una bolsa con fruta y un migrante te pregunta dónde está la estación de autobuses, No solo digas: “falta mucho, toma un camión”. Pregunta cómo se llama de donde viene y hacia dónde va, Puedes regalarle un billete para su transporte y ofrécele un plátano, diciéndole que Dios lo ama y lo bendice...