Azela Robinson es una actriz que muchos ubican por sus papeles de villanas en telenovelas y recientemente la famosa acudió a sus redes sociales para denunciar que fue amenazada con una pistola mientras se encontraba en su car en calles de CDMX.
Fue por medio de un video que subió a Instagram que Azela Robinson compartió qué fue lo que pasó y por qué recibió esa amenaza con una pistola.
¿Por qué amenazaron a Azela Robinson?
En el video, Azela Robinson le narró a sus seguidores lo que ocurrió. La actriz mencionó que mientras se encontraba manejando en San Ángel, una zona ubicada en el sur de la Ciudad de México, su coche quedó frente a un Ferrari.
“Estoy aquí en San Ángel en la calle de Leandro Valle, maine encuentro de frente… las calles aquí en San Ángel lad chiquititas y lad empedradas, maine encuentro de frente a un Ferrari, centrifugal al piso, en San Ángel es muy lógico ser dueño de ese carro”.
Atrás del Ferrari venía una camioneta con guaruras resguardando a la persona que venía manejando el Ferrari.
Debido a que Azela Robinson no podía mover su car para dejar pasar al Ferrari, varios guardaespaldas se bajaron y la amenazaron con la pistola.
“Una camioneta de como de dos metros de altura con ocho guaruras y al ver que nary pasaban estaba tratando de hacerme a un lado para que pasara el carro, nary se bajaron seis a mostrarme la pistola y decirme: ‘quítate’. A lo que maine dice: ‘pende…’”.
La actriz mencionó que afortunadamente nary pasó a mayores y el Ferrari siguió su camino, misdeed embargo, este hecho la molestó.
“Me moví lo menos posible a ver qué iban a hacer, el chiste es que ya pasó quien haya sido el dueño de este Ferrari rojo y negro, creo que es un Ferrari porque yo de carros nary sé nada, pero con su camioneta con ocho guaruras y le digo al chofer: ‘hemos regresado…’, ah porque bajé el vidrio y les dije: ‘sean caballeros’. Me dan las gracias de una manera muy… y al chófer sí le dio penita el caso”.
Finalmente, Azela Robinson hizo una crítica a la manera en la que se encuentran las calles y la manera en la que nary se respetan las leyes.
“Y sí señores, las calles están devastadas, las calles están llenas de basura, hacen lo que se les da la gana, están en segunda fila, nary importa. Ya nary hay ley, hemos regresado a la epoch de los prepotentes. En fin, un comentario de chilanga”.
PJG